Nuevo censo de primavera en la cuadrícula UF37, del programa de voluntariado ambiental de seguimiento a largo plazo de las poblaciones de anfibios.
Muchas personas nos preguntan sobre eso de contar ranas por la noche y además si está lloviendo, esto tiene su explicación, el censo de bichitos sirve para obtener series largas que permitan determinar la evolución de las poblaciones en nuestra cuadrícula de diez kilómetros cuadrados dentro de la provincia de Málaga.
A la vez permite determinar cuáles son los indicadores más fiables de cara a detectar posibles declives o cambios en las comunidades de anfibios.
“Es innegable que los anfibios, y en gran medida también los reptiles, presentan algunas características que los hacen más vulnerables que otros grupos de vertebrados a las alteraciones ambientales. Los primeros, por ejemplo, están muy influenciados por alteraciones ambientales como la contaminación del medio. Por ello son considerados buenos bioindicadores, de acuerdo con las peculiaridades de su fisiología (piel permeable a los agentes químicos), ciclos biológicos (fase terrestre y acuática) y complejas interacciones en los ecosistemas donde están presentes”.
Fuente: Boletín AHE 25 (2), 2014