“Los emprendedores sociales no quedan satisfechos ni dando un pescado a alguien ni enseñándole a pescar. Son personas que no van a descansar hasta haber revolucionado por completo la industria de la pesca”. La frase pertenece al estadounidense William Drayton, presidente de la Fundación Ashoka, cuya trayectoria fue distinguida el pasado 8 de junio con el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación. El jurado de los premios reconocía así la labor de proselitismo de Drayton en favor de los llamados “emprendedores sociales”, término que él mismo acuñó en 1972. El fallo destacaba como novedad y valor añadido el hecho de que Drayton no solo apoye a las personas en sus proyectos sino que base dicho apoyo en criterios de sostenibilidad económica, lo que nos pone sobre la pista de qué es el emprendimiento social.